ERNESTO VILLAR MIRALLES (Alicante,1849- Novelda, 27/XII/1916)
Artista polifacético que desarrolló múltiples facetas fundamentalmente, las de violinista, compositor director, arreglista, escritor y poeta. De todo ello dejó un importante legado tanto a nivel musical como literario.
“Procedente del Cuerpo Pericial de Aduanas, don Ernesto Villar desempeñó durante siete años el cargo de Inspector de la Renta de Alcoholes en Novelda y su distrito, siendo de notar la pesada labor que llevó a cabo con sin igual pericia y honradez hasta su jubilación reglamentaria, que recibió en Novelda hace dos años.
No era hijo de esta ciudad don Ernesto, pero sus relevantes méritos personales, por su hombría de bien, por sus talentos y amor a la cultura popular , bien merecía que su nombre figurara entre los de los hijos adoptivos de Novelda, ya que Novelda fue uno de sus más caros amores...
...Todo el mundo recordará su gestión como individuo de la Junta de Festejos en el Centenario de Jorge Juan y su cooperación en tantas funciones religiosas…
...Era nuestro nunca bastante bien llorado amigo un hombre de ciencia, un gran literato y un eminente músico. Tenía el título de la Real Academia de Artes de San Fernando y había sido profesor y Secretario de la Escuela Normal Superior de Maestros de Alicante y Director de la Insigne Iglesia colegial de San Nicolás, en la misma capital, de donde era hijo.
Entre sus obras literarias figuran las siguientes: “Alicante Artístico-Musical” con un prólogo del Barón Mayals; “Compendio de Legislación Escolar” obra declarada de texto; un estudio sobre Cervantes y un sin número de composiciones poéticas, premiadas en concursos. Pero su verdadera pasión, su alma toda de artista estaba concentrada en la música. Tenía publicados también algunos libros sobre el divino arte y actualmente se ocupaba en la traducción de una magna obra musical de Vicent D’Indy, por encargo especial del editor de don Manuel Villar de Valencia. Como compositor tiene un sin fin de obras hermosas, resaltando entre ellas la marcha triunfal “¡Por la Paz!” que el pueblo de Novelda oyó ejecutar durante las pasadas fiestas de la Magdalena a la Banda Militar del Regimiento Vizcaya; la sinfonía “Gloria” y más de doscientas composiciones religiosas, sin contar sus innumerables arreglos de obras para Banda y Sexteto. El Sexteto Chapí le debía todo su repertorio, y la Banda Municipal de Novelda gran parte del suyo.
Su cadáver fue conducido hasta el cementerio a hombros de los que formábamos aquel Sexteto por el cual tanto trabajó nuestro amigo...”
Texto de Ignacio Beltrá Marí. Pubicado en el periódico Avante, el 29 de julio de 1917